Después de un tiempo determinado de uso existe la posibilidad de que se deposite aceite en el motor, es algo bastante habitual en las campanas extractoras. No obstante, esto se puede evitar realizando una correcta limpieza y respetando el tiempo de cambio de los filtros. Cabe destacar que ahora existen campanas con el motor blindado, pero los modelos más económicos no disponen de esta característica.
Otra de las fallas más comunes de las campanas es que el motor se queme cuando sobrepasa su capacidad de funcionamiento. Es importante recordar que debes encender tu campana extractora dos minutos antes de comenzar a cocinar y apagarla dos minutos después de haber terminado, si se pasan esos tiempos es muy probable que la salud del motor empeore con mucha rapidez.
Los fusibles son los dispositivos más antiguos de protección contra posibles fallos en circuitos eléctricos, con el paso del tiempo y uso suelen fundirse, lo mismo pasa con las bombillas. Por ello, cuando esté fundido puede reemplazarse por otro con las mismas características. Eso sí, es importante asegurarse de que la bombilla que reemplazará a la fundida es apta para campanas extractoras.
Recuerda que para que tus electrodomésticos duren deben recibir el trato adecuado: limpiezas periódicas y mantenimiento cada cierto tiempo.